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De todos es sabido que la Biblia cita el número 666 como la “señal” de la bestia, y que relacionamos con el Anticristo. El origen de esta asociación está en el libro del Apocalipsis de san Juan contenido en el Nuevo Testamento. Aunque descubrimientos más recientes parecen indicar que debería ser el número 616, tal y como supuestamente esta reflejado en un fragmento del Nuevo Testamento encontrado hace unos pocos años atrás.
Estos descubrimientos relativamente recientes como los de los papiros de Oxirrinco que constituyen una de las colecciones manuscritas más importantes, (actualmente en el Ashmolean Museum de Oxford) confirman que el número representado en el original ( el Apocalipsis de San Juan) en realidad fue el 616. Aunque ya se sabía de otras fuentes que la variante de 616 existía, puesto que autores como San Ireneo lo mencionan. Así pues, esto sugiere que la primera redacción del Apòcalipsis de Juan debió de haber contenido el número 616 para referirse al nombre de una persona o ser a quienes los primeros cristianos denunciaban como enemigo.

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2 comentarios:

  1. El diario británico "The Independent" se hizo eco de esta noticia y publicó un fragmento del recién descubierto Nuevo Testamento que indicaba que el número de la Bestia no era el 666, sino el 616.
    El famoso numero 666 conocido por todos y que ha servido para elucubrar y marcar de alguna forma al Anticristo sale de un párrafo del mencionado libro del Apocalipsis de San Juan y dice así... Aquí hay sabiduría. El que tiene entendimiento, cuente el número de la bestia, pues es número de hombre. Y su número es seiscientos sesenta y seis.
    Habiendo sido esta frase traducida del griego antiguo, los entendidos en esta materia mantienen que las evidencias fotográficas del trozo de papiro del libro de la Revelación conocido como Apocalipsis de San Juan muestra el número 616 en lugar de 666.
    Cabra preguntarse ahora si este error de traducción de unos antiquísimos legajos han hecho también “patinar” a las manifestaciones sobrenaturales cuando estas han plasmado por todo tipo de superficies estos fenómenos “Pneumatograficos” (o aparición de escritos espontáneos en paredes, papeles, etc)

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  2. Así pues cabria preguntarse si las supuestas manifestaciones pneumatograficas también desconocían el nuevo numero de la bestia, pues así aparentemente lo han demostrado en sus hasta ahora manifestaciones pictóricas, o bien si lo conocían, estarían haciendo uso de nuestras creencias aun siendo estas equivocadas, con que fin? o podríamos decir que de seria sabiendas del efecto del numero en nosotros?.
    Además, se encontraran las entidades invisibles ante un handicap de identidad?, o utilizaran el numero de siempre con quienes no estén enterados de estos últimos descubrimientos y con los mas avezados investigadores emplearan el nuevo numero?. Ante todo entiendo que en el otro lado siguen manteniendo un nivel de inteligencia sublime, de ahí mis dudas.
    Para apuntillar un poco mas si cabe a las anteriormente aludidas entidades diré que después de leer ciertas investigaciones sobre antiguos legajos, entiendo que los primitivos cristianos asignaban números a sus implacables perseguidores a modo de nombre en clave y para que el que no tuviese que entender no entendiese, de tal manera y a modo de ejemplo uno de ellos era el emperador Nerón, y como digo para no nombrar su nombre (el innombrable) se le asignaba un numero, por lo que el numero de la bestia era una alegoría en referencia a sus perseguidores.

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